La inteligencia es la capacidad de elegir, entre varias posibilidades, aquella opción más acertada para la resolución de un problema. Para desarrollamos nuestro intelecto, y lo ponemos al servicio del mundo y de nosotros mismos, estamos siendo inteligentes.
Una persona inteligente es aquella que tiene aptitudes para analizar e interpretar, posee capacidades de síntesis y aprovecha los elementos de su entorno para sacar un eficiente provecho existencial como individuo y saber servirse de ellos en forma racional y lógica para aumentar sus capacidades físicas e intelectuales por sobre el medio existente, se trata de poner en juego nuestros conocimientos y aptitudes en todas las acciones de nuestra vida cotidiana, y por ello somos capaces los seres humanos de desafiar obstáculos que día a día se nos presentan.
La inteligencia es una cualidad que todos los seres humanos poseemos, aunque no todos podemos tenerla de igual manera estimulada y desarrollada, pero podemos usar nuestra inteligencia para crear soluciones de vida para todos por igual, así hacer del mundo un lugar mejor para todos.
Sin embargo, un mito muy peligroso sobre la inteligencia es el que descalifica a las personas con notas bajas. Aunque la educación es una disciplina de carácter principalmente intelectual, no existe ningún tipo de evidencia empírica que demuestre que los malos estudiantes no son inteligentes.
Por el contrario, estadísticas sobre el coeficiente intelectual de los estudiantes, demuestran que no existe ningún tipo de correlación entre inteligencia y notas. Así como encontraron estudiantes de notas bajas con un alto coeficiente intelectual, encontraron estudiantes aplicados con un coeficiente intelectual promedio, y viceversa. Una frase muy famosa del físico alemán Einstein lo explica todo: “Si juzgas a un pez por su habilidad de trepar, creerá durante toda su vida que es un inútil.”.
Otro mito que existe es que las personas nacen inteligentes. Aunque pueda existir la predisposición genética que cause un alto coeficiente intelectual, el cerebro se desarrolla principalmente por la práctica.
Asimismo, el verdadero potencial de una persona no sale a la luz a menos que participe en actividades que la estimulen. Si una persona no es buena en matemáticas, no es que no sea inteligente, significa que necesita enfocarse en mejores métodos de estudio para obtener mejores notas en clase.
Ejemplo de inteligencia
Las personas inteligentes deben ser capaces de identificar sus errores, no cayendo en un narcicismo por el que piensan que todo lo hacen bien. Se trata de encontrar el equilibrio.